Cada año, el segundo domingo de noviembre, la Iglesia en España celebra el Día de la Iglesia Diocesana, una jornada especial para recordar que todos formamos parte de una misma familia de fe. Es un día para dar gracias, para orar y para colaborar con el sostenimiento de nuestra Iglesia local.
Este año, bajo el lema “Tú también puedes ser santo”, la campaña nacional nos recuerda que la santidad no es un ideal lejano ni reservado a unos pocos, sino una posibilidad real, cercana y cotidiana para todos.
La Diócesis de Cartagena se une a esta celebración renovando su compromiso con la evangelización, la atención a los más necesitados y el sostenimiento de la vida pastoral de nuestras parroquias.
1.- ¿Qué es el Día de la Iglesia Diocesana?
El Día de la Iglesia Diocesana es una jornada que la Iglesia en España dedica cada año a fortalecer el sentido de pertenencia y corresponsabilidad dentro de la comunidad diocesana. Se trata de recordar que la Iglesia no es solo el templo o el sacerdote, sino el conjunto de personas que, con su tiempo, oración y recursos, hacemos posible su labor evangelizadora, educativa, cultural y caritativa.
Es un día para dar gracias, orar y colaborar con nuestra Diócesis, sosteniendo su misión con nuestras aportaciones y nuestro compromiso activo. Como señala el lema de este año, se trata de vivir la santidad en lo cotidiano: en la parroquia, en la familia, en el trabajo y en la comunidad.
2.- ¿Desde cuándo se celebra?
El Día de la Iglesia Diocesana comenzó a celebrarse en España a comienzos de la década de 1980, impulsado por la Conferencia Episcopal Española, para fomentar la transparencia y la corresponsabilidad de los fieles en el sostenimiento de la Iglesia.
A partir de este año 2025, el Papa Francisco ha establecido el 9 de noviembre —día de la Dedicación de la Basílica de Letrán—, como jornada para conmemorar en las Iglesias locales a los santos, beatos, venerables y siervos de Dios, reforzando así la conexión entre santidad y vida diocesana.
En este contexto, la fecha adquiere un significado aún más profundo: celebrar la Iglesia local como lugar donde la fe se encarna y la santidad florece. Y es importante destacar que no se busca insertar una nueva memoria en el calendario litúrgico, sino de promover a aquellas figuras que han caracterizado el camino y la espiritualidad cristiana local.
En el caso de Totana, tenemos a los 4 beatos totaneros:
- Beato José María Cánovas Martínez (1894-1936)
- Beato Juan José Martínez Romero (1889-1937)
- Beato Pedro José Rodríguez Cabrera (1903-1937)
- Beato José Acosta Alemán (1880-1937)
José María Cánovas fue beatificado en 2007, y los demás, en 2017.
3.- La importancia de celebrarlo y difundirlo.
El Día de la Iglesia Diocesana tiene una importancia doble: espiritual y material.
- Desde el punto de vista espiritual, nos recuerda que la Iglesia es una familia viva y dinámica. En palabras de Mons. D. José Manuel Lorca Planes, obispo de Cartagena: “La Iglesia es una familia, una familia de hermanos, en la que nos importamos unos a otros. Porque el amor siempre va más allá, es más atrevido, es más dinámico, no tiene límites”.
- Desde el aspecto material, este día nos llama a participar en el sostenimiento económico de nuestra Diócesis. Las aportaciones voluntarias de los fieles hacen posible el mantenimiento de parroquias, templos, seminarios y proyectos sociales, además de apoyar la labor educativa, pastoral y caritativa que se realiza a lo largo del año.
Y es importante destacar que donar no es solo un gesto de generosidad, sino una forma concreta de pertenecer, de hacer Iglesia juntos. Las contribuciones pueden realizarse en las parroquias, mediante domiciliación o a través de la web Dono a mi Iglesia, una plataforma desarrollada por la Conferencia Episcopal Española para facilitar la colaboración directa con cada parroquia o diócesis.
4.- El mensaje del Vaticano para la Campaña 2025.
En el marco de esta campaña, el Papa invita a redescubrir el corazón de Cristo como fuente de vida y santidad: “El corazón de Cristo, traspasado por amor, es la carne viva y vivificante que nos acoge a cada uno de nosotros, transformándonos a imagen del Buen Pastor”.
El Santo Padre recuerda que la santidad no consiste en grandes gestas, sino en amar a Dios y al prójimo en las pequeñas cosas de cada día. “La santidad no pertenece solo al pasado, sino que está llamada a encarnarse hoy, en la vida de cada comunidad, en la entrega callada, en el perdón, en la paciencia y en el servicio”.
Su mensaje se une al espíritu de esta jornada: hacer visible la santidad cotidiana que nace del amor y del compromiso.
5.- Mensaje del Obispo Don José Manuel Lorca Planes.
En su carta pastoral titulada «Tú también puedes ser santo», Mons. Lorca Planes profundiza en la llamada universal a la santidad como camino de libertad y alegría. Recordando las palabras de san Pablo —«Ya no vivo yo, sino que es Cristo quien vive en mí» (Gal 2,20)—, nuestro obispo nos invita a poner a Jesucristo en el centro de la vida, alejando ideologías e intereses personales. “Un cristiano confía en el Señor, porque la esperanza le viene de Cristo, que le da la fortaleza para asumir su responsabilidad evangelizadora”.
Mons. Lorca anima a toda la comunidad diocesana a vivir con fe y esperanza, cuidando la vida interior, la oración y la comunión fraterna. “Que Cristo cuente con nosotros para ponernos al servicio de los demás, siendo testigos gozosos del amor que sana, acompaña y redime”. Y nos recuerda que el camino de la santidad no es inaccesible, sino el camino del coraje, de la vida y de la alegría, y que el verdadero discípulo está llamado a dar razón de su fe “con dulzura, respeto, sencillez y humildad”.
6.- Cifras destacadas de la Diócesis de Cartagena
La Diócesis de Cartagena es una Iglesia viva y comprometida, sostenida por miles de fieles y voluntarios que hacen posible su misión evangelizadora.
Durante el último año, ha desarrollado su labor en los seis ámbitos que definen su acción pastoral: celebrativo, pastoral, educativo, misionero, cultural y caritativo-asistencial.
Algunos datos significativos muestran la magnitud de este trabajo:
- 292 parroquias activas en toda la diócesis.
- 417 sacerdotes al servicio pastoral y 57 seminaristas en formación (San Fulgencio, Redemptoris Mater y Menor San José).
- 3.690 catequistas y 2.645 voluntarios comprometidos en tareas pastorales.
- 521 religiosos y religiosas, 131 monjas de clausura y 146 misioneros (sacerdotes, religiosos y laicos).
- 51.523 personas en exclusión atendidas durante el último año a través de Cáritas y otras entidades diocesanas.
Estas cifras reflejan una Iglesia que acompaña, educa, acoge y sirve, sosteniéndose gracias a la colaboración de toda la comunidad cristiana.
Para concluir…
El Día de la Iglesia Diocesana es una oportunidad para mirar con gratitud y esperanza a nuestra diócesis. Nos recuerda que todos formamos parte de una misma familia y que cada gesto, cada oración y cada colaboración cuentan.
El lema “Tú también puedes ser santo” nos invita a reconocer la santidad que florece en lo cotidiano: en el voluntario que sirve, en el catequista que acompaña, en el sacerdote que celebra, en el fiel que ofrece su oración y su ayuda con amor.
Como expresa Mons. Lorca Planes: “Que Dios os bendiga. Os animo a que todos tomemos conciencia de que somos una familia. En nombre de las más de 51.000 personas atendidas en la Diócesis, doy las gracias por vuestra generosidad”.
Celebrar este día es renovar nuestro compromiso con la Iglesia local y con el Evangelio, convencidos de que la santidad está al alcance de todos y cada uno de nosotros.